UNA PEQUEÑA APORTACIÓN DESDE MI HUMILDE EXPERIENCIA, SOBRE COMO SE PUEDEN INTENTAR SOLUCIONAR LOS PEQUEÑOS PROBLEMAS DIARIOS QUE SE PRODUCEN EN LAS ESCUELAS.
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jueves, 3 de septiembre de 2015

LA VUELTA AL COLE

Es una fase que podemos ver en una multitud de vallas publicitarias estos días, gracias a una famosa marca de grandes almacenes, pero aquí no quiero hablar del regreso de los niños/as, ese está ampliamente tratado en revistas y periódicos, y además por sesudos especialistas, yo quiero referirme a la de los docentes.
Se trata de un síndrome postvacacional como otro cualquiera, como el de otra profesión, no es muy diferente, a todos nos cuesta pasar de los días de relax, a los de la actividad productiva. Tampoco hay que incidir mucho en el tema, los primeros días cuesta levantarse, ves al despertador como el gran enemigo al que te gustaría destrozar, pero no pasa de ahí. Me quiero centrar en los maestros/as que llegan nuevos al colegio, y que se deben acoplar al engranaje operativo de los mismos.
Cada centro tiene su idiosincrasia propia, cada uno tiene una realidad particular y una historia escolar detrás, que marca su forma de actuar y de organizarse, por ello, aunque vengas de otro colegio de la misma localidad, puedes encontrarte con organizaciones de lo más dispar.
Como la mayoría de la plantilla no está en esta situación, podemos caer en el error de dar por evidentes cosas, que en realidad, no lo son en absoluto. Desde mi propia experiencia personal, puedo recordar incorporaciones a colegios, donde necesité todo un curso, para poder entender, incluso conocer, algunas de las normas organizativas o de los eventos programados. Incluso, esta situación, me generó el enfado de algunos compañeros/as, que me reprochaban que no hubiese actuado de determinada manera, cuando yo era desconocedor absoluto de la forma de hacer en ese evento determinado, y que se salía de la norma general.
Por eso, dada la complejidad del funcionamiento de nuestros grupos de apoyo y de de la organización flexible en las áreas British Council, intentamos facilitar a los nuevos toda la información posible por escrito, en formato informático, para que puedan repasarla las veces que consideren oportuno, tenemos toda la paciencia de la que somos capaces, para explicar las cosas las veces que sean necesarias, y así se lo hacemos saber. Además esta actitud no se mantiene solamente por parte del equipo directivo, sino por todos los componentes del claustro, que entienden que ellos/as también estuvieron en esa situación.
Esta realidad es la que nos da, por otro lado, sensación de grupo de trabajo, y no de unión de docentes que trabajan en el  mismo centro, tener sensación de proyecto común, es lo que nos hace avanzar en nuestro empeño diario. A los compañeros/as que vienen por primera vez, hay que ayudarles a subirse al barco, no podemos olvidar que al estar en marcha es muy difícil una incorporación a bordo de forma individual, somos conscientes de ello, y al menos intentamos facilitarles su integración.
Puede parecer algo tonto a la hora de programar la organización del colegio, pero a mi parecer, es una de las labores más importantes del equipo directivo, mucho más que elaborar unos horarios excelentes.

 Solo si somos capaces de trabajar todos/as a una, en un proyecto común, podremos salir adelante en nuestro empeño educativo. Y eso tenemos que empezar a trabajarlo con todos los que se incorporan, dándoles todo el cariño posible, para que sientan partícipes absolutos, desde el primer momento

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